- I will never forget it ~ [Actualización varios capítulos]

jajajajajajajjajajajajajajaajaj LÚL Ú me mori de risa con eso x dios ajajajja!!!me muero!sos una genia!

xDDD

no es para tanto... xDDD

por cierto... le estamos offtopiqueando el fic a Gema... areyouok

Donde está la jefa para poner orden??xDDD que nos desmadramos!! onimiedow

xD

xD Jajaja! Si, la verdad es que esto cada vez habla menos de la historia. A ver si aparece pronto.

OFFTOPIQUEANDO EEHH!!!??? EN MI PROPIO FIC???!!! ò________Ó manamnaz

*Lulú-chan* escribió:: AAAAAAAHHHH!! Me has dedicado el capiiiii!!! uaaaaaaa, graciaaaaaasss!! y creo que es porque Stephan ha estado presente en tooooooodo el capii xDD uouououooooo!! que fuerteee! Gema me lo ha quitadooo! zorra ¬¬ xDDDDDDD na, es brooooma xD jo, que moooooono!! y que contraste, porque me lo imagino como en la foto, ahi to cachas y con la mirada esa tan profunda como diciendo: arrr, ven aqui que te voy a dar lo tuyo xDD (lo tuyo=--- galletas?) y despues en el ascensor con carita de oso amoroso diciendo cosas...amorosas xD. OOOiiii! que mooooooono! ademas, ashlee simpson y el no pegan, jum! xDDDDDDDD vaaaale, ya me caaaallo xDD Sigueloooouu! <3333

Jajajajaaj te lo he quitadoo e___e XDDDD Nah, una, que vale y ya está (H) XDDDD
Si tia con los brazacos esos que tiene y yo como SOS!! XDDDDD
ña :3

*Lulú-chan* escribió:: Claaaaaaro, osea que estas diciendo que la he sobornado??xDDDD en plan:
Yo: eh, tu... si, si tu... tssss, voy a hacerle un club de fans a Stephan pero tienes que darme algo a cambio
Gema: pero... yo... no tengo mucho... te vale con 10000€ ?
Yo: no.. tiene que ser algo más gordo o si no vas al padrino, tu verás.
Gema: noooo, al padrino no
Yo: entonces es o capi dedicado o nada
Gema: eso va más allá de todo lo que tengo... no... no puedo
Yo: entonces...
Gema: vale, vale...
Yo:

Algo asi?xDDDDDDD

VALE, ME DA XDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
Esto se merece un premio XDD

SeaWave escribió:: xD Si, creo que le vendria bien un respiro... ahora, que no he dicho que vaya a darselo Era broma.

O.O OMG!! xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
Ais, me meo con vosotras XDDD

*Lulú-chan* escribió:: xDDD no es para tanto... xDDDD

No es para tanto dice xDDDDDDDDDDDDDDDDDDD

Vale, estoy en ello chicas, que ademas ahora tengo otros dos fics tambien y no doy abasto xDD Espero tener el capitulo cuanto antes! n__n

2 fics??????? ofantsmo

Y que hacen que no estan aqui colgados?? othh2

xDD Queremos los fics de Gema!!
Nosotr@s: muajjojojo

Gema:

jajaj!YEAH!!yo te apoyo!!!QUEREMOS LOS DOS FICS!!!

Me uno a la masa!!! xD Una pegunta Gema (parida): cuando dices "me da XDD", a que te refieres? comh??xd

Si, toda una parida.

yo ya se cual es el otro fic!!!puso la "preentacion"del fic en un foro de TH,o sus caracteristicas no se bien como definirlo pero no sbuio cap ¬¬

creo q es ese!

CHICAAAAAAAAS!!!!
Siento no haber subido capi antes pero esque he tenido unos problemas T____T Me estaban formateando el PC y solo podia escribir en el portatil de mi hermano, y claro, al ser de mi hermano tenia que compartirlo u____u Pero en fin, aqui os traigo un capi nuevo, un poquito mas largo de lo normal. Espero que no vuelva a pasar T___T En serio me ha sentado fatal no haber subido antes T__T
Sobre el otro fic, la chica que lo comparte conmigo esta en este foro, asi que SI ELLA QUIERE lo pondremos aqui xDDDD

Bueno, os dejo el capi :3

Capítulo 6.

Me planté en frente de la puerta 5.832, la habitación de Bill, decidida a hablar con él y pedirle perdón.

Estaba sola, ya que había quedado luego con Stephan para contarle lo que había pasado. No sabía exactamente que era lo que teníamos, ya que apenas nos conocíamos desde hacía un día y no sabía más que su nombre, pero… Quería intentarlo.
Nunca había besado a nadie, ni tampoco se me habían lanzado, pero sí había sentido atracción por alguien, sólo que… Era demasiado tímida como para intentar cualquier cosa con un chico, y mucho más si era alguien a quien apenas conocía.

Aparté de mi mente a Stephan y volví a pensar en Bill, ya que era lo único que me debía importar ahora. No sabía aún que decirle, y lo que me había pasado me había descolocado aún más…

- Ya está bien, Gema. Es hora de que te enfrentes a tus problemas. –me dije a mí misma en voz alta.

Toqué a la puerta, pero nadie me abría, así que volví a tocar al cabo de unos minutos.
Después de unos instantes alguien abrió lentamente, podría decir que lo hizo con cautela. Esperaba encontrar a Bill al otro lado, enfurecido conmigo. Aunque no me extrañé al encontrarme a su gemelo.

- Tom, yo… -salió de la habitación, cerrando la puerta- Quería hablar con Bill… -agaché la cabeza-
- Ven, Geme, ahora Bill está escribiendo, dejémosle…

Bufé. Ahora Bill se ponía a escribir una de sus canciones… en que momento. Sabía que siempre que tenía algún cambio brusco de emociones se ponía como un loco a escribir y componer, pero esta vez me fastidiaba un poco, ya que quería pedirle perdón y dejar de sentirme culpable… aunque sólo fuera en una pequeña parte, ya que creo que tardaría muchísimo tiempo en dejar de pensar en ello… Como siempre.

- Tom, ¿puedo hablar contigo? –musité.
- Claro, pequeña, vamos a mi habitación, ¿vale? –me pasó un brazo por los hombros y nos encaminamos a su habitación.

Cuando Tom me hablaba así, de forma dulce, y me llamaba pequeña o cualquier cosa, me hacía sentir como si fuera su hermanita pequeña… Me sentía como cuando tenía diez años y las monjas del orfanato me trataban con tanto cariño como el de Tom en esos momentos.
Parece un tío chulo y pasota, pero en realidad tiene un corazón que no le cabe en el pecho, y siempre que necesito algo, ahí está él… Al igual que Bill.

- ¿Porqué…? ¿Me tratas así ahora…? – susurré, esperando una respuesta “lógica”. Ahora no me merecía tanto cariño, después de herir a uno de mis mejores amigos, el cual es su hermano gemelo.
- Tonta, te hablo como lo necesitas ahora… Soy el mayor de los tres y tengo que animaros ahora. ¿Cómo te crees que le he hablado a Bill para quitarle la llorera?

Entramos a su habitación y nos sentamos en el sofá. Estábamos en silencio y sin mirarnos… Me arrimé un poco a Tom y lo abracé, empezando así a llorar en su pecho, como una niña pequeña… Buscando protección. Me pasó un brazo por encima para abrazarme, y con el otro se puso a acariciarme el pelo.

Nos pasamos así al menos trenta minutos: abrazados, sin decirnos nada y con el único sonido de mis sollozos. Tom sabía de sobra que si cuando lloraba me hacía que hablara, no iba a poder decir nada y tampoco iba a poder parar de llorar.
A decir verdad, Bill y Tom ya conocían mis estúpidas tonterías, como lo de “¿quien soy?”…

- Tom, lo siento. –tragué saliba- Siento que tú y Bill tengáis que aguantar mis tonterías.
- ¿Tonterías? –susurró- Mira Geme, no he querido decirle nada a Bill antes, pero tienes razón.
- ¡¿Qué?! –me quité de sus brazos y le miré a la cara.
- Geme… soy su gemelo, y le conozco. Bill es un romántico empedernido, es como un Romeo que busca desesperadamente a su Julieta, pero que al preocuparse tanto de si esa Julieta va a aprovecharse de él, desconfía de todo el mundo, incluso de ese amor que busca desesperadamente. –me miró a los ojos y resopló.
- Yo no pienso lo mismo… -desvié su mirada- Mira, Bill fue la primera persona que confió en mí cuando llegué, fue mi primer amigo en Tokio Hotel, y eso nunca –recalqué la palabra “nunca”- lo voy a olvidar. Gracias a él empezasteis a hablarme los demás, ¿recuerdas? – le miré a los ojos- Para mi significa mucho la amistad de Bill, pero como siempre… -mis ojos se volvieron a empañar- Lo tengo que joder todo.

Me levanté del sofá y me apoyé en la pared de enfrente, empezando a llorar desconsoladamente. Tom se levantó apresuradamente del sofá y se vino a mi lado… Empecé a contárselo todo, el porqué de mi llanto y de cómo me estaba afectando lo de Bill.
Cuando terminé de contárselo todo me miró a los ojos y estuvo regañándome durante un buen rato… Motivos tenía para ello.
Estuvimos un rato en silencio y luego empezó a hablarme de otras cosas, e hizo algunas bromas. Este Tom… siempre animando a los demás.
Cuando acabamos de hablar, me dijo que seguramente Bill ya habría terminado de escribir, así que me aconsejó que sería un buen momento para hablar con él.

- Tom, ¿puedo usar tu baño antes de ir a ver a Bill? Tengo que verme horrible después de tanta lágrima. –solté una risita.
- Claro, entra sin problemas.
- Gracias. –sonrió y yo le devolví la sonrisa.

Entré en el baño y me miré a espejo. Estaba completamente horrible, aunque mi ánimo había subido gracias al mayor de los gemelos. Me sorprendí de lo ordenado que se encontraba el aseo, ya que, a decir verdad, Tom era bastante desordenado algunas veces.
Me reí para mis adentros.

Saqué de mi bolso un neceser de maquillaje y me arreglé un poco… Salí del baño y me encontré a Tom hablando por teléfono, pero cuando me vió se despidió y colgó.

- Ahora si que te ves mucho mejor Geme. –sonrió.

Salimos de su habitación, y poco antes de llegar a la de Bill decidí decirle a Tom lo de mi supuesta “relación” con Stephan. Dudé antes de hacerlo, ya que no sabía si se iba a enfadar conmigo o… Crucé los dedos de todas formas.

- Tom…
- Qué.
- Tengo algo que decirte… -susurré, y me miró- Stephan, el chico de la cafetería, y yo… Nos hemos besado. –articulé lentamente.
- ¡¡¿Qué?!! –me miró con los ojos como platos y paró en seco de caminar.
- ¿Qué ocurre? –paré de caminar yo también y agaché la cabeza.

Al parecer mis temores se habían hecho realidad y Tom no veía bien lo mío con Stephan, o al menos eso me había hecho entender su reacción.

- Gema… No es un poco… ¿mayor? –habló pausadamente.
- Bueno, en realidad no lo sé, pero… La edad no importa. –murmuré.

Stephan parecía más mayor que Bill y Tom, pero tampoco aparentaba treinta y tantos años… Seguramente tendría unos veinti cuatro como mucho decir.

- Haz lo que quieras con tu vida, Geme. A mí no tienes porqué darme explicaciones.

Empezó a caminar apresuradamente hasta la habitación de Bill. Yo le seguí cabizbaja, ya que: sí, era mi vida, pero… No iba a hacer algo que Tom viera mal, o que Bill no aceptara… Eran como mis hermanos y no me sentía cómoda haciendo algo que a ellos no les gustara.
En ese momento me puse a pensar en algo. Bill había desconfiado antes de Stephan, por lo tanto, si le decía que nos habíamos besado… Mi corazón dio un vuelco pensando en la posible reacción de Bill, ya que sentía como si estuviera traicionándole.

Basta ya, Gema. Ya está bien de tantas tonterías. Eres mayorcita, ¿no? Entonces haz lo que quieras con tu vida. Tienes a tus amigos Bill, Tom, Georg y Gustav, además tienes a Natalie… ¿Qué pasa porque tengas novio? Nada. Te estás comportando como una niña estúpida. Deja que los demás opinen lo que quieran, ya habrá alguna forma de que estés bien con todos. Además, ¿a cuantas groupies se había llevado Tom delante de tus narices? A muchas. ¿Y tú le has dicho algo? No, siempre has sido su amiga pese a todo, así que es hora de que él acepte algo que haces tú. Y lo mismo pasa con los demás.

Después de mi “charla interior” cogí a Tom rápidamente de la mano antes de llegar a la habitación de Bill. Paró de caminar y me miró extrañado.

- Tom, yo siempre he estado a tu lado hicieras lo que hicieras, así que ha llegado el momento en que tu hagas lo mismo por mí. ¿Porqué no apuestas un poco por lo mío con Stephan? –hizo una mueca- Mira, hagamos un trato: si me hace daño te dejo que le rompas la boca, ¿de acuerdo? –sonreí.

Tardó un poco en contestar, pero al final lo hizo. Asintió y me devolvió la sonrisa.

my bueno como ya te dije en el otro foro!me encanta segui!!

PD:hablas del fic haces con lika??lika esta aka??

Wolaa. Que bien te ha quedado el capitulo :+-+:

Uaaaa estoy esperando es proximo >w< A mi no se me a hecho largo, es mas ,ha sido incluso cortito. Sigue asi :okknrt:

Waaaaaaaa! 5.832 habitaciones???? XDD que fuerte! cacho pedazo de hotel!!! eso tiene que ser infinitamente infinitoo xD bueno, prosigamos: Largoo?? PARA NADAAA! se me ha hecho super cortoo xD y esq encima lo dejas justamente cuando va a hablar con Bill ¬¬ xD ahora por tu bn... ESCRIBEEE!!! srsmndrl!

............. por favor?? mon103

xDDDD

Os traigo capi recien sacado del horno e.e Espero que os guste nenas^^

Capítulo 7.

- Bill, yo...

No sabía por donde empezar –otra vez-. La charla con Tom me había aclarado un poco las ideas y me había dejado más tranquila, pero al ver los oscuros y penetrantes ojos de Bill mirándome con tristeza noté como se me hacía un nudo en el pecho y la disculpa que tenía pensada no serviría de nada.

Bill estaba sufriendo, y no era sólo a causa de lo que hoy.

Sabía que no iba a ser capaz de decirle un simple “Lo siento” y con una sonrisa suya olvidar todo lo que había pasado. No... Iba a hacer lo único que mi corazón me decía en esos momentos, y no sabía si era lo más correcto, o si tal vez Bill me apartaría bruscamente, pero... No podía hacer otra cosa.

Me levanté apresuradamente del sofá de su habitación y... Le abracé.

Noté como estaba rígido, pero después de sentir mi abrazo se volvió... ¿débil? Era como si fuera un niñito buscando a su mamá en medio de una gran multitud. No encontraba a esa persona y tenía miedo, mucho miedo. Lloraba en silencio, ya que creía que la gente podía raptarle y llevárselo para siempre del lado de su mamá...
Así es Bill, un niño acongojado que sólo busca alguien en quien confiar y entregarle su amor.

Sus brazos me rodearon a los pocos segundos de abrazarle y noté como su tristeza me invadía... Sufría viéndole así. Era mi mejor amigo y no soportaba tener que verle de esa forma, como un alma en pena...

- Bill, lo siento muchísimo. –articulé entre sollozos- Perdóname, por favor...

No obtenía respuesta por su parte –lo cual no me extrañó-, simplemente seguíamos abrazados. Al cabo de unos cinco minutos suspiró y se apartó un poco de mí.
Estaba llorando.
Cuando lo ví, con miles de lágrimas recorriendo su rostro, noté como el agujero que tenía en el pecho se hacía más profundo, sentí como si me clavaran un puñal en el corazón... Estaba acostumbrada a verlo con su esplédida sonrisa iluminando su rostro, por lo que verle así, con el rostro sombrío y lleno de lágrimas hacía que me sintiera verdaderamente mal...
Sin darme cuenta puse una mano sobre su mejilla derecha, limpiando aquellas estúpidas lágrimas.

- No tienes porque pedir perdón, Gema. –puso una mano sobre la mía, y me acarició dulcemente.
- ¡No es cierto! Yo he hecho que tu herida se hiciera más profunda. –me limpié con la otra mano las lágrimas que salían de mis ojos. – Sé lo mal que lo estás pasando, y sin embargo...
- Sin embargo, ¿qué?

Su semblante no cambiaba, pero no por ello dejaba de llorar. Me daban ganas de darle una bofetada y gritarle que era tonto, que no tenía que llorar por eso, pero... No podía.

- Sin embargo he hecho que te pusieras así, ¿te parece poco? –alcé mi voz.
- Gema, no lo entiendes. Lo que me has dicho... me ha ayudado. –susurró.
- ¿A qué te ha ayudado? –pregunté, atónita.
- A reflexionar. –hizo una pausa- Creo que lo mejor es que te haga caso, y... a Tom también. Tal vez, si no desconfiara tanto de la gente... Ahora sería feliz.

No sabía qué contestarle. A decir verdad, sí... Es posible que si no desconfiara tanto de la gente –concretamente de las chicas-, si que podría tener una novia guapísima y encantadora, que no se aprovechara de su fama y de su dinero. Porque haberlas así, las hay, y más siendo él tan buena persona y tan guapo como es, que con un simple guiño de ojos puede tener a la persona que quiera.

- Tengo una idea. Para que me perdones te voy a encontrar una novia buena, buena. ¿Qué te parece? –sonreí, y vi como poco a poco iba sonriendo él también.
- Geme, que no te tengo que perdonar, ¡no has hecho nada! –al fin, sonrió.

Verle sonreír otra vez hizo que la alegría me invadiera, aunque sólo fuera en una pequeña parte. Al fin estaba mejor, y se notaba, ya que había dejado de llamarme Gema.
Seguimos hablando durante una hora sobre esto y además le comenté que había hablado con Tom y que me había regañado. Le conté el porqué de la regañina y su respuesta fue la misma que la de su hermano.

- Es que le he contado a Tom porqué estaba tan mal con lo que te había dicho...
- ¿Y porqué estabas tan mal?
- Bill, es una historia muy larga...
- Hay tiempo para esa historia. Hasta mañana no volvemos a Alemania. –sonrió.
- Te lo resumiré... –suspiré- Mira Bill, yo nunca he tenido suerte con las amigas que tenía en el orfanato, ¿sabes? Siempre acaba peleándome con ellas por alguna tontería mía o porque yo era... el payaso de todas ellas. –alzó una ceja- Se metían conmigo. Me gastaban bromas pesadas, me insultaban, me rompían mis cosas... –abrió los ojos de par en par.
- ¿Y las monjas no hacían nada?
- Bueno, a veces... La mayoría de las veces ni se enteraban, ya que ellas lo hacían a escondidas y yo no decía nada... –agaché la mirada, ya que estaba recordando momentos de mi infancia no muy felices, y eso... me incomodaba.- Por eso, cuanto más me callaba, más se metían conmigo.
- ¿Y porqué no decías nada?
- Bill... Ellas antes habían sido mis amigas. Que digo amigas, ¡mejores amigas! Confié en ellas tanto que... Cuando nos peleábamos, eran una pelea tan fuerte que siempre, iba al baño y... Me intentaba suicidar. –susurré.
- ¡¡¡¿Qué?!!! –gritó enfurecido, apartándose de mi lado y mirándome asombrado.

Comencé a llorar, ya que recordaba como intentaba cortarme las venas con cualquier cosa en aquellos baños, deseando dejar este mundo y dejar de sufrir... Pero nunca podía, nunca tenía el suficiente valor como para profundizar las heridas de mis muñecas unos milímetros más... Ya que era una cobarde. Siempre lo había sido.

Bill empezó a regañarme como lo había hecho su hermano, sólo que él estaba gritando y enfurecido. Yo sólo asentía y le pedía perdón una y otra vez.

Por eso me dolía ver así a Bill, porque era la única persona, él único amigo que había tenido en mi vida que mereciera la pena y yo le había hecho llorar...
Yo había sido la mala.

Aii!! Me ha encantado el capitulo! Que pasado mas triste el de Geme T×T Sigue escribiendo! Que mola mucho!! :okknrt:

Capítulo 8.

Salimos de la furgoneta en la que habíamos ido a la reunión y me dirigí al hotel, hablando con Bill sobre la gira que habíamos tenido y sobre que haríamos en navidades. Sí, volvía a ser el Bill de siempre: el Bill que reía a carcajadas y hacía que todo fuera genial... Y eso me hacía sentirme bien.

- Bill, una pregunta. ¿Sabes a que hora nos vamos mañana?
- Mmm... Creo que un poco antes las doce. –hizo una pausa- Según nos comentó David, dejaremos el hotel antes de las doce, comeremos en el aeropuerto y subiremos al avión sobre las cinco de la tarde... O eso creo. –se llevó una mano a la cabeza y empezó a reírse.
- Vaya, que poco tiempo... –susurré, pensando en el poquito tiempo que tendría para... mis cosas.
- ¿Poco? ¿Para qué? –inquirió él, alzando una ceja.
- Nada, nada, pensaba en voz alta. –no quería contarle a Bill mis “planes”, ya que tampoco le había dicho nada de Stephan. No quería decirle nada de momento.
- Mentirosa. –me quedé en blanco.- Pensabas en susurros.

Los dos empezamos a reírnos ante la broma de Bill y luego seguimos hablando un poquito más, hasta que pasada la puerta de aquel majestuoso hotel, me despedí de él y de los demás, que venían detrás de nosotros.
Bien, ahora tenía cosas que hacer. Una de ellas era mi maleta y la otra era hablar con Stephan.

Me dirigí al ascensor para subir a mi habitación, por si venía a por mí. Por el camino me di cuenta de varias cosas... Para empezar, no sabía nada de él. No sabía sus apellidos, su edad, de donde era o... su habitación. Y tampoco sabía cuales eran sus intenciones conmigo, y eso era lo peor de todo.
No, yo no era una muñeca de trapo, que la podías usar y luego, ¡plim!, deshacerte de ella. No, yo no era así. Yo era la típica niña que busca a su “Romeo” para toda la vida, la que acepta una flor antes que un collar de diamantes... Podría decirse que yo era una “romántica empedernida”, por lo tanto, no estaba dispuesta a ser el juguete nocturno de Stephan. Ni de él, ni de nadie. Así que aunque me pareciera atractivo y encantador, no iba a aceptar sólo un royo. No.

Entré en mi habitación y me tumbé en la cama, quitándome los tacones y lanzándolos por los aires. Tenía los pies molidos. Habitación aquí, habitación allá, paseito aquí, paseito allá... Oh Dios mío. Estuve unos minutos en mi cama, tumbada, hasta que me levanté para ponerme unas zapatillas –las típicas de estar por casa- y mirarme al espejo del baño.
En ese momento le di las gracias a Natalie por haberme ayudado con el maquillaje antes de la reunión, ya que la cara que tenía esta mañana y la que tenía ahora eran totalmente diferentes. Sí, definitivamente el maquillaje hacía milagros.

Me sobresalté al oír la puerta, ya que alguien había llamado, y noté como aquellas “mariposas” en mi estómago que había sentido al besar a Stephan, volvían a revolotear llenas de vida. “¿Será él?”, pensé por un segundo, y luego noté como se me ponían los nervios a flor de piel.

- ¡Ya voy! –grité.

Me puse los tacones de nuevo y abrí la puerta, encontrándome a “mi chico” allí delante, con una espléndida sonrisa que iluminaba todo su rostro.

- Hola. –me saludó en voz baja, dejando ver su timidez hasta ahora desconocida para mí.
- Hola... –contesté, en un leve susurro.

Seguía con aquella magnífica sonrisa suya, y yo se la devolví aunque algo cohibida, ya que me moría de vergüenza, y las mariposas seguían en mi estómago. Serán cosas del primer amor.

- ¿Quieres pasar? –le invité, ya que supuse que si no lo hacía estaríamos toda la tarde en la puerta de la habitación.

Asintió y entramos en la habitación -noté que llevaba algo escondido a su espalda-. Me quedé mirándole un rato, en silencio, ya que me sorprendió lo guapo que iba –a diferencia de mí, claro está-. Llevaba puesta una camiseta negra a bonotes, un poco remangada y con algunos bonotes desabrochados, y tenía un pantalón vaquero oscuro junto con unos zapatos de vestir negros. Aunque estuviera moreno el negro le quedaba impresionante, y su buena proporción física hacía que fuera irresistible. Claro que, sin contar que su pelo era perfecto y sus ojos, profundos y penetrantes, harían tambalear a cualquier chica. Por un momento pensé: ¿de verdad es mío?

- Oye Gema, te he triado esto... –su voz me distrajo de aquellos pensamientos.

Quitó una mano de su espalda y me mostró lo que llevaba ocultando desde que había venido. Era una preciosa rosa de un color rojo escarlata. Le miré a los ojos asombrada, con la boca abierta, y me sonrió.

- ¡Oh, Stephan! ¡Es perfecta! –contesté emocionada.- Muchas gracias. No tenías porque hacerlo.
- ¿Por qué no? –me entregó la rosa y la cogí delicadamente.- Eres mi novia.

Noté como el corazón casi se me salía del pecho al escuchar esas palabras. “Eres mi novia”. Sonaba tan... bien.
De pronto, colocó dulcemente sus manos en mis mejillas, acercándome a sus labios y nos besamos. Las mariposas seguían bailoteando, aunque no las culpé, ya que yo también tenía ganas de bailar y reír. En esos momentos estaba plenamente feliz: Bill me había perdonado, Stephan era mi novio... No había nada más perfecto que aquello, me sentía como una quinceañera a la que la vida le sonríe.

Dejé la rosa en la habitación y fuimos a dar una vuelta por Roma, ya que Stephan se ofreció como mi guía. Por el camino fuimos viendo muchísimos monumentos y lugares increíbles, pero también nos fuimos conociendo un poquito más.
Me comentó que tenía 23 años y que había nacido allí, en Roma, aunque se había criado durante su adolescencia sobretodo en el extranjero, en lugares como Francia, España, Reino Unido, América... Ya que sus padres tenían que viajar constantemente.

- Una cosa, si eres de aquí, ¿porque estás en un hotel? –íbamos cogidos de la mano, paseando.- Quiero decir, ¿no tienes una casa aquí, en Roma?
- Mmm... Tener, tener, si tengo, pero es la de mis padres, y estoy... “Enfadado” con ellos.
- ¿Enfadado? ¿Por qué? –me extrañó muchísimo. Yo no tenía padres, y él que sí que tenía, estaba enfadado con ellos. Ironías de la vida.
- Si, esque mi padre es el dueño de esta cadena de hoteles...
- ¡¿En serio?! –le interrumpí.

Estaba sorprendida, ya que nosotros siempre que podíamos intentábamos alojarnos en un hotel de esa cadena, porque son increíbles y dan muy buen servicio, y dentro de lo que cabe, no son tan caros como otros. Además, estaban en muchos lugares, podría decirse que estaban en todo el mundo.

- Exacto. Bueno, y mi padre, al ser dueño de toda esta cadena de hoteles, y yo ser su único hijo, quiere que sea... El heredero de todo eso. –susurró.
- Oh, y tú no quieres, ¿verdad? –guau, el heredero de todo.
- No. –contestó, tajante- Mira Gema, a mí me gusta viajar, pero no por obligaciones, y también me gusta tener mi propia vida. Es decir, tener ciertas horas de trabajo y fuera de esas horas tener mi tiempo libre. No estoy hecho para ser un jefazo como lo es mi padre, y parece que él no lo entiende. –hizo una pausa- Incluso me quería obligar a sacarme la carrera de empresariales, pero mi madre, al ver que yo no quería le persuadió para que aceptara que yo quería estudiar otra cosa.
- ¿Y que has estudiado? O, bueno, estás estudiando. –pregunté, curiosa.
- Pedagogía en educación parvularia, hace un año que acabé la carrera.
- ¿Profesor de parvulitos? –inquirí, soltando una risita- ¡Qué monada!
- Sí, profesor de parvulitos. –sonrió- Aunque no estoy trabajando, porque como ya te he dicho, me encanta viajar, y además, con los beneficios del hotel que me pasa mi madre, tengo para vivir de sobra. La carrera es un plan B por si mi madre dejara de pasarme ese dinero. –empezó a reírse- Podría decirse que soy un vividor.

Me reí con él y seguimos charlando. Me comentó que en realidad con quien no mantenía el contacto era con su padre, que con su madre se llevaba estupendamente, y me dijo que había decidido estudiar esa carrera ya que siempre había tenido que cuidar de sus primos porque él era el mayor, y por eso le encantaban los niños.

Seguimos dando vueltas por Roma –yo ya ni sentía los pies por los tacones, pero me daba corte decírselo-, y le conté yo también cosas sobre mí. Que no tenía padres ni hermanos, que era la traductora de Tokio Hotel, que vivía en un apartamento en Hamburgo, que mis pasiones eran viajar y los idiomas...

- Si me vas a venir bien y todo, con lo que me gusta viajar, ya tengo traductora. –nos reímos.
- ¿Qué idiomas sabes Stephan? –pregunté intrigada. Para viajar a muchos sitios también hay que saber idiomas.
- Pues... Inglés, francés e italiano, por supuesto. Luego sé un poco de español, alemán y ruso.
- ¡Ruso! ¡Impresionante! Yo no sé ruso. –le sonreí.
- Bueno, yo tampoco lo sé muy bien, pero me puedo defender. –me guiñó un ojo- Es lo que tiene que te hayas criado en tantos sitios, que tienes que aprender los idiomas, o sino...

Poco rato después, decidimos volver al hotel –le comenté que estaba cansada y volvimos en taxi-. Sin darme cuenta ya era de noche cuando llegamos, y se acercaba la hora de cenar, así que me propuso que fuéramos a cenar al restaurante.

- ¿Qué te parece si vamos juntos a cenar? –esbozó una sonrisa- Puedo pedir que nos lo preparen todo.

Me quedé pensativa durante unos instantes... Recordé que la noche anterior Tom me había invitado a cenar pizza junto con Bill, y yo le dije que tal vez hoy... Me sentí un poco mal, ya que me apetecía pasar una estupenda noche llena de risas con ellos, pero claro, también mañana me iría y no volvería a ver a Stephan hasta Dios sabe cuando.

- ¿Gema? –inquirió Stephan, viendo que no le contestaba.- ¿Tienes otros planes? Si es así no te preocupes por mí, ¿vale? –me acarició la cara dulcemente.
- ¡No! Es sólo que anoche le dije a Tom que iría a cenar con él y con Bill... –fui bajando el tono de voz poco a poco.
- ¿Bill? ¿Tom? –preguntó- ¿Son los de Tokio Hotel?
- Sí, y son mis mejores amigos. –suspiré.
- Ah, entonces no te preocupes, vé con ellos. –sonrió un poco, aunque noté como su mirada cambió.
- No, no. Mañana me voy y... –nos quedamos unos instantes en silencio, mirándonos a los ojos.
- ¿Mañana? –pronunció, con un hilo de voz.
- Así es... Ayer acabó la gira y mañana,... volvemos a casa. –suspiré otra vez, preocupada.
- ¿Y cuando volveremos a estar juntos? –susurró, agachando la mirada.
- No lo sé, Stephan... Es posible que pasen incluso cinco meses hasta que volvamos de nuevo aquí.
- ¡¿Qué?! –gritó, mirándome a los ojos con fuerza. Noté como todos los que estaban en la recepción nos miraban. - ¡No! Gema, ¡voy a ir a Alemania contigo!

Me quedé helada con esas palabras. Voy a ir a Alemania contigo. ¿Era eso posible? ¿Era verdad que no me quería como una muñeca de trapo? Pero no, era imposible que pudiera venir a Alemania conmigo; en el avión sólo íbamos el equipo de la banda, y conseguir un billete para Alemania justamente para mañana por la tarde era demasiado complicado.

- ¿Pero cuando? Stephan, mañana es imposible.
- Ya lo sé. Iré en unos días, primero miraré el hotel de mi padre más cercano, o sino buscaré un apartamento, pero Gema, voy a ir. –dijo con voz serena y mirándome a los ojos.

No sabía que hacer, ni que decir, así que hice lo único que se pasó por mi mente. Me acerqué a él. Me puse de puntillas y lo besé, agarrándome a su cuello. Noté como colocó sus manos en mi cintura y me devolvía el beso apasionadamente.

- Voy a ver a Bill y Tom,–dije, aún abrazados- me arreglo y vamos a cenar. –sonreí, y él hizo lo mismo.

geniales lso dos caps!!a(aunke el 8 ya se un tiempo q me lo lei en el foro de TH)me encanta!!
segui!

Que bien!

Hacia unos dias que tenia pendiente lo de leerme el capitulo (esque el tiempo escasea un "poquitin") pero no me arrepiento -*w*- Que majo Stephan! Y si, menudo vividor esta hecho! xDD Jejej Sigue escribiendo! Very Happy

Dios tengo que escribir como sea D: Que me he centrado en el otro fic que tengo con una amiga y de ahi no salgo! xDDDD

Como mola, parece un doramaaa kyaaaaaa :ñaaaaw:

Así es como me he imaginado la escena en la que Gema le dice a Stephan que se va xD:

Gema: Stephan José Ernesto
Stephan: Qué onda güey???
Gema:... yo... debo partir hasia Alemania.
Stephan: Pero Gema María Esmeralda! cuando es eso?
Gema: Mañanita
Stephan: me has hecho de chivo los tamales!
Gema: No! yo te amo Stephan José Ernesto! es sólo que... debo ir. No hagas corajes.
Stephan: De acuerdo, no repelaremos más wacamole mío.
Gema: grasias Stephan José Ernesto! sabía que lo entenderías! te amo!!
Stephan: has de chivo los tamales y no te encules de nadie.
Gema: Ok, byeee!

Ay, se suponia que era un dorama y me ha salido en plan culebron mejicano xDDD Sigueloooouu!

*Lulú-chan* escribió:: Como mola, parece un doramaaa kyaaaaaa Así es como me he imaginado la escena en la que Gema le dice a Stephan que se va xD:

Gema: Stephan José Ernesto
Stephan: Qué onda güey???
Gema:... yo... debo partir hasia Alemania.
Stephan: Pero Gema María Esmeralda! cuando es eso?
Gema: Mañanita
Stephan: me has hecho de chivo los tamales!
Gema: No! yo te amo Stephan José Ernesto! es sólo que... debo ir. No hagas corajes.
Stephan: De acuerdo, no repelaremos más wacamole mío.
Gema: grasias Stephan José Ernesto! sabía que lo entenderías! te amo!!
Stephan: has de chivo los tamales y no te encules de nadie.
Gema: Ok, byeee!

Ay, se suponia que era un dorama y me ha salido en plan culebron mejicano xDDD Sigueloooouu!

ai dios mio xDDDDDDDDDDDD

me orino me orino xDDDDDDDD
yo tambien lo estaba pensado, se suponia que era un dorama y parecia mas una telenovela xDDDD

Última edición por SeaWave el Sáb Mar 20, 2010 5:18 pm, editado 1 vez

*Lulú-chan* escribió:: Gema: Stephan José Ernesto
Stephan: Qué onda güey???
Gema:... yo... debo partir hasia Alemania.
Stephan: Pero Gema María Esmeralda! cuando es eso?
Gema: Mañanita
Stephan: me has hecho de chivo los tamales!
Gema: No! yo te amo Stephan José Ernesto! es sólo que... debo ir. No hagas corajes.
Stephan: De acuerdo, no repelaremos más wacamole mío.
Gema: grasias Stephan José Ernesto! sabía que lo entenderías! te amo!!
Stephan: has de chivo los tamales y no te encules de nadie.
Gema: Ok, byeee!

JAJAJAJAJAJA!!!!!!!!!! :jajaja:

Que me parto!... Que me parto!!!!.... Ha sido buenisimo. Aunque no sepa que quiere decir "me has hecho de chivos los tamales", me he reido mucho con eso. Pero cuando mas he reido y no he podido parar ha sido con "wacamole mio". Diooooooos!! Aun me hace mucha gracia! xDD Hay, tienes un don, Lulu, tienes un don!

me has hecho de chivo los tamales es como ''me has puesto los cuernos'' xD esq lo encontre en una página de expresiones mejicanas xDDDD

Tengo una buena noticia: VOY A PONERME A ESCRIBIR AHORA MISMO Very Happy

xDDDDDDDD

SIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! mm02

» Cambios Varios~